En la actual situación de emergencia sanitaria, las noticias sobre el estado del sistema de salud y las medidas restrictivas eclipsan otros temas de interés, como el cambio climático o los nuevos avances en tecnología.
Hoy hablaremos de algo que seguro habrás oído hablar, pero quizás aún no terminas de entender del todo, el coche de hidrógeno.
Antes de pasar a explicar el funcionamiento de un vehículo con motor de hidrógeno, vamos a entender mejor qué es el hidrógeno y sus características.
Hidrógeno, características y fuentes de obtención
El hidrógeno es un gas combustible cuya fórmula es H2. Es el gas más ligero del universo. Cuando lo quemamos genera agua, esta es su mayor virtud frente a la combustión de combustible fósiles, cuyo resultado es la emisión de dióxido de carbono y otros gases perjudiciales para la salud como las partículas, los óxidos de nitrógeno o el monóxido de carbono.
El Hidrógeno se puede obtener a través de dos fuentes:
- A partir de gas natural y otros combustibles fósiles, proceso que, como ya sabemos, genera emisiones de dióxido de carbono y que a la larga no nos ayuda en nuestra lucha con el cambio climático.
- La otra forma de obtención es la electrólisis del agua, mediante la cual, se descompone el agua haciendo pasar una corriente eléctrica continua procedente de una fuente de alimentación, una pila o batería, que se conecta mediante electrodos al agua.
Una vez obtenido el hidrógeno es posible almacenarlo para ser utilizado, por ejemplo, en los motores de los coches.
¿Cómo funciona un coche de hidrógeno?
Es común pensar que como el hidrógeno es un gas, el mecanismo puede ser es el mismo que los coches de GLP o autogás, el combustible alternativo más utilizado en el mundo. Imaginemos un motor de cilindros, de combustión interna, donde quemaríamos ese hidrógeno, esto es a priori es posible, pero tiene un gran inconveniente, su escasa autonomía.
Como ya sabemos el hidrógeno es un gas muy ligero, tan ligero que, cuando lo comprimimos continúa en estado gaseoso. Al no convertirse en líquido como otros gases combustibles que manejamos habitualmente, nos es difícil almacenarlo en grandes cantidades.
¿Podríamos convertirlo en líquido? La respuesta es sí, pero tendríamos que criogenizarlo, enfriarlo, de manera similar al nitrógeno líquido, lo que generaría un mayor coste energético y económico. Además, el proceso de combustión como tal es un proceso muy ineficiente, que no aprovecha toda la energía posible del combustible.
La poca cantidad de combustible de hidrógeno que podemos almacenar y la baja eficiencia de los procesos de combustión reducen drásticamente la autonomía del coche de hidrógeno, por este motivo, la mayoría de los fabricantes de vehículos optan por otro sistema, la pila de combustión de hidrógeno.
La Pila de Combustión de Hidrógeno
Los coches con pila de combustión de hidrógeno son coches con un motor eléctrico, impulsados por una pequeña batería, más pequeña que la de los coches eléctricos convencionales, que genera energía eléctrica utilizando el hidrógeno como combustible.
El hidrógeno, almacenado en un depósito, alimenta a la pila de combustible, que a su vez transforma el hidrógeno en energía eléctrica que alimenta a la batería del motor eléctrico y este último la transforma en movimiento.
Este sistema es similar al de los coches eléctricos de rango extendido, que poseen un generador eléctrico para alimentar la batería cuando se agota, pero en lugar de generar electricidad a partir de diésel, lo hacemos a partir de una pila de combustible.
Ventajas e Inconvenientes de los coches con pila de combustible
Como has podido comprobar aún quedan muchos retos que resolver para la implantación del coche de hidrógeno, así como para la masificación del coche eléctrico.
Y tú, ¿cuál crees que podría ser el coche del futuro, el de hidrógeno o el eléctrico? o por el contrario ¿piensas que tendremos que recurrir a otra alternativa?
Me interesa tu opinión, cuéntamela escribiéndome un correo: helena.malaga@hotmail.com.
También puedes escribirme para pedirme que escriba sobre ese tema que tanto te interesa, o que te causa sorpresa e incredulidad y quieres saber cual es su explicación científica.
Cada vez más se están viendo coches eléctricos para ser usados de forma compartida por los ciudadanos de las grandes ciudades. Las diferentes alternativas de movilidad compartida existentes hasta la fecha están renovando sus flotas de coches por coches eléctricos o de hidrógeno, más respetables con el medio ambiente y económicos para las compañías que los usan.